11 febrero 2013

Tierra de baobabs I

Parece que nunca iba a ver la luz pero aquí está, por fin, la crónica por capítulos de nuestra luna de miel en Tanzania…

El primer día estuvimos en el Parque Nacional de Tarangire, tierra de baobabs (Adansonia digitata).


Bajo uno de ellos, pudimos ver un antilope de agua (Kobus ellipsiprymnus). En otro estaba posado un ejemplar de halconcito africano (Polihierax semitorquatus).


Las ramas de otros baobabs eran también estupendos posaderos para un juvenil de buitre moteado (Gyps rueppellii) y para una rapaz que bien podría ser un águila culebrera (Circaetus cinereus).


No fueron las únicas rapaces que avistamos. También posada se encontraba un águila rapaz (Aquila rapax), o quizás esteparia (Aquila nipalensis), lo desconozco. En la copa de una acacia, un buitre orejudo (Torgos tracheliotus) se reunía con un compañero.


En el cielo africano se recortaba un águila pomarina (Aquila pomarina) mientras que fue un deleite ver caminar a un elegante secretario (Sagittarius serpentarius).


Minutos antes habíamos fotografiado a una hembra de impala (Aepyceros melampus) bajo una acacia. Más tarde, Tarangire nos reservaba a dos machos poniéndose a prueba…


Lo poco gusta y lo mucho cansa. Es la sensación que tuve con el omnipresente estornino soberbio (Lamprotornis superbus). Más discreto era, sin embargo, el cenizo (Lamprotornis unicolor).


También pudimos fotografiar al piapiac (Ptilostomus afer), al alcaudón culiblanco (Eurocephalus rueppelli) y al bubú fúnebre (Laniarius funebris).


Muy pronto, la segunda parte de Tarangire. Mientras tanto, me despido con nuestros parientes más cercanos: los papuinos oliva (Papio anubis) y los cercopitecos verdes (Cercopithecus aethiops).

2 comentarios:

Miguel dijo...

que bien!!! por fin en el blog las tan esperadas "memorias de África"... me ha gustado mucho...
enhorabuena por el relato y por las "holoturiofotos"... todas geniales, aunque me ha gustado especialmente la del secretario...

un abrazo

Marco de Mesa Cáceres dijo...

¡Miguelón!

Muchas gracias por tu comentario. Ver el secretario fue una pasada, la verdad...

Un abrazo.