27 noviembre 2006

Al fondo hay sitio

Nueva baza para producir insulina

Nueve mil setecientas treinta y seis. Este es el número de visitas que tenía una de las noticias de Biology News, justo antes de que entrara a leerla. ¿El tema? Diabetes tipo I.

No es de extrañar. Según datos de la OMS (Organización Mundial de la Salud), el número de diabéticos en el mundo asciende a más de 180 millones. Razón de peso para invertir grandes sumas de dinero en su investigación, ¿no? A título personal, creo que así debería ser… Pero, amigo, poderoso caballero es don Dinero. Mucho es el gasto que desembolsan, desembolsamos, los diabéticos en insulina, lancetas o tiras reactivas de glucosa, ya sea de manera directa o indirecta; gasto que, con el fin de la diabetes, quedaría reducido a cero. Seguro que algunos empresarios se “cabrearían” mucho con dicha reducción…

Opiniones aparte, lo que está claro es que cada vez son mejores las perspectivas para el paciente diabético. ¿Lo más reciente? Parece ser que el trasplante de células de bazo procedentes de un ratón adulto a otro que presentaba la patología crónica tuvo como resultado la normalización de los controles de glucemia. Tras la intervención, las que fueran células del bazo comenzaron a secretar insulina, de igual manera que lo harían, en condiciones no patológicas, las células beta de los islotes de Langerhans…

No nos engañemos. Largo es el camino que separa a todos estos avances del quirófano por el que, supongo, pasaremos muchos tarde o temprano. Mientras tanto, a esperar.

Imágenes tomadas de:
http://vivre-avec-un-diabete.ifrance.com/etranger/menarini_glucocardGmeter.gif
http://www.novonordisk.fr/media/Levemir_Flexpen.jpg

24 noviembre 2006

Ecografías

Aquí dejo las ecografías de un elefante y un delfín.
Fuente:
www.elmundo.es

La crueldad sin límites

Cuando añadí la sección de Bioprotestas a “El rincón de Marco” nunca llegué a pensar que vería algo como lo que hoy he visto... La crueldad sin límites. Un acto de salvajismo que nos separa de ese primate inteligente que decimos ser. Una vergüenza para la especie a la que representamos.

Dada la excesiva dureza de las imágenes que se muestran en el video que me ha mandado una compañera (María) por e-mail, considero que lo más lógico es añadir un enlace y no colgarlo en el blog... No sé si se puede, pero aunque así fuera.

Recomiendo verlo. Muchos estamos en contra del uso de pieles pero una imagen en movimiento vale mucho más que millones de fotografías y palabras.

17 noviembre 2006

Asedio celular

Hoy en día, hasta los estudiantes de Biología introducimos DNA en células. No es algo raro en los laboratorios sino todo lo contrario...

Cuando se pretende integrar un fragmento de DNA en el genoma de un organismo se obtiene un transgénico, siempre que se consiga.

Los métodos para llevar a cabo este proceso denominado transformación son múltiples pero los investigadores han de pelearse con resultados poco eficientes y altas tasas de mortalidad entre las células transformadas.

El tiempo dirá si un nuevo procedimiento ideado por el equipo de Dong Cai tiene éxito en el futuro y se hace un hueco entre los actuales. Lo que no se les puede negar es la originalidad...

La clave reside en el uso de nanotubos de carbono de 40 nm de diámetro y de una longitud variable: entre 1 y 20 micras. Dicho nanotubo está acoplado a una partícula de níquel magnetizada. El DNA se asocia a los nanotubos mediante un enlace amida catalizado por la carbodiimida. De ésta manera, se constituye una estructura a modo de flecha que adquiere energía cinética gracias a un agitador magnético que gira a 1200 rpm.

Tras el asedio a las células, estas quedan transformadas con gran eficiencia y viabilidad, al menos en ensayos en los que se empleaba una línea tumoral. En células del bazo y neuronas corticales, los resultados fueron más discretos. Para hacer un seguimiento de las células transformadas se recurrió a una variante de la proteína verde (GFP), de ahí el color de la imagen.

La nueva técnica, como no podía ser de otra forma, plantea interrogantes. ¿Cómo puede mejorarse la eficiencia? ¿Pueden ligarse los nanotubos a otras moléculas? Se admiten apuestas.


Fuente:
“Like Amazon Indians”. Hubert Rehm. Lab Times, 3, 48-49, September/October 2006

Imágenes tomadas de:

15 noviembre 2006

La zarpa furtiva

Poco se habla del tema pero está de actualidad... Trampas y venenos acechan cada día la vida de nuestros osos (Ursus arctos). La última víctima fue captada ayer por una de las cámaras colocadas en Proaza (Asturias) por Fapas (Fondo para la Protección de los Animales Salvajes). El ejemplar presentaba cicatrices en su cuerpo, recuerdo de la lucha que, en algún momento no muy lejano, debió entablar con una trampa de acero cuyo destinatario era un jabalí... Sin embargo, otros individuos no corren la misma suerte. En algunas ocasiones, se han avistado hembras con sus oseznos; oseznos que, tiempo después, desaparecían del mapa... Y es que no todos pueden escapar de la zarpa furtiva.

No hace ni una semana que se dieron a conocer los resultados de una necropsia practicada a un oso que fue hallado muerto hace un año por el CSIC (Centro Superior de Investigaciones Científicas) en el concejo asturiano de Somiedo. El oso no murió de muerte natural sino de muerte cerebral. El causante fue un alcaloide denominado estricnina...

Ante este panorama desolador, es de vital importancia el papel de organismos como Fapas o la Fundación Oso Pardo. Un miembro de ésta última nos dijo que “todos hacían un poco de todo”. Concienciación, educación, muestreos, retirada de trampas... Cualquier medida es poca para preservar al oso pardo.