18 julio 2007

Las dos caras del escorpión dorado israelí

Tenía mala fama... Le equiparaban a la mismísima muerte... Todo por ser el poseedor de uno de los venenos más potentes que existen... Hoy en día, el escorpión dorado israelí (Leiurus quinquestriatus) puede estar orgulloso... El temible verdugo se ha convertido en uno de los mejores aliados de la lucha contra el cáncer. La clave se encuentra en uno de los constituyentes de su jugo mortal: la clorotoxina.


La clorotoxina es un péptido que se une específicamente a los canales de cloro de las células gliales cancerosas del encéfalo. Debido a su especificidad, la clorotoxina ha sido ligada a diferentes compuestos antitumorales en diversas investigaciones. Sin embargo, hace tres días, se publicó que el péptido podía ser conjugado con el fluorocromo Cy5.5.

El tándem resultante emite en el infrarrojo cercano y pone de manifiesto, con un alto nivel resolutivo, aquellas células que son de tipo canceroso. En otras palabras, las células tumorales quedan “teñidas” y pueden ser retiradas, con gran precisión y en su totalidad, por un neurocirujano. Habrá aún que esperar para ver si, en un futuro, este procedimiento puede servir para la eliminación de otros tipos tumorales así como para plantar cara al horrible fenómeno de la metástasis.

Imagen tomada de: Serpentarium Blankenberge
Información tomada de:
Children's Hospital and Regional Medical Center
Toxins to treatments

4 comentarios:

Jorge Gutiérrez dijo...

Muy buena información (:

Marco de Mesa Cáceres dijo...

Hola Jorge,

Muchas gracias por pasarte por el blog y dejar tu comentario.

Un saludo.

Anónimo dijo...

Increíble, lo vi en la National geographic y me parece increíble, voy a buscar un paper científico a ver si no es muy complicado para mi nivel de conocimiento (tercero de bioquimica xD)

Marco de Mesa Cáceres dijo...

Seguro que sí, Anónimo. Gracias por tu comentario.

Un saludo